Los Smartphones están a disposición del gran público desde finales de la década de 20001 y las aplicaciones se han ido incorporando poco a poco a nuestra vida cotidiana. Hoy, sin ir más lejos, puede que hayas empezado el día con una taza de café y la versión digital del periódico en tu tablet. Tal vez hayas salido a correr antes de entrar al trabajo y hayas comprobado la distancia y el rendimiento alcanzados en tu reloj inteligente. O quizás hayas utilizado tu aplicación de fitness para una sesión matinal de yoga o pilates.
Y la cosa no acaba ahí. Casi tan numerosas como las aplicaciones que utilizamos en nuestra vida privada, son las aplicaciones y herramientas software que empleamos para el desempeño de nuestras tareas en el trabajo, y que pueden dividirse en varias categorías.
Por un lado, están aquellas aplicaciones que nos facilitan el trabajo y nos liberan de tareas organizativas. Estas aplicaciones de productividad, o software de productividad, nos ayudan a organizarnos, a acceder de forma rápida a distintas bases de datos, a gestionar mejor el tiempo... en definitiva, a aumentar nuestra eficiencia. Algunos ejemplos son las aplicaciones para el registro digital de la jornada de trabajo, las herramientas de gestión de proyectos y tareas, las listas de tareas pendientes, las aplicaciones de optimización de procesos y mucho más.
Por otro lado, hay aplicaciones que mejoran la comunicación interna y la colaboración entre compañeros de trabajo, equipos y clientes. Hoy en día, las empresas tienen tantas filiales internacionales que la colaboración entre equipos va más allá de las fronteras geográficas. Además, los empleados que teletrabajan o se desplazan a menudo necesitan estar localizables en todo momento.
Las aplicaciones de comunicación permiten a los empleados estar perfectamente interconectados entre sí y con los clientes, gracias a una serie de potentes funciones. Estas apps ofrecen, por ejemplo, la posibilidad de realizar una llamada a través del softphone desde cualquier dispositivo, contactar con los compañeros por videollamada, participar en reuniones virtuales o híbridas con total flexibilidad, compartir pantalla, visualizar el estado de presencia antes de ponerse en contacto con una compañera o resolver una duda rápida a través de un mensaje de chat. En función del sector, las aplicaciones y el software especializados también pueden responder a las necesidades de los mercados verticales, mejorar el servicio al cliente, fidelizarlo (por ejemplo, a través de programas de fidelización) o proporcionar mecanismos avanzados de asistencia.
El nivel de familiarización con las aplicaciones que utilizamos a diario es total. Éstas se desarrollan a un ritmo vertiginoso, y, a menudo, no tenemos presente el enorme impacto que estas sofisticadas tecnologías tienen en nuestras vidas. Las ventajas parecen infinitas, tanto para los particulares como para las empresas:
El uso cada vez mayor de aplicaciones (móviles) en nuestra vida privada y profesional ofrece, sin duda, una serie de ventajas, pero también entraña algunos peligros.
Seguramente te resulte familiar: acabas de descargar una nueva aplicación en tu teléfono móvil y te sorprende de la cantidad de autorizaciones y derechos de acceso a la información del dispositivo que se requieren antes de poder utilizarla finalmente. Por regla general, no suele ser buena idea conceder todos los permisos de acceso a la ligera, ya que esto puede conducir a la llamada "minería de datos", la extracción de grandes cantidades de datos personales. Desde un punto de vista económico, los datos son un activo valioso y su análisis reviste un interés considerable para los mercados basados en el consumo con distintos grupos destinatarios. Si los datos personales o la información empresarial confidencial caen en las manos equivocadas y acceden a ellos terceros no autorizados, el peligro es real.
En la era digital, la ciberseguridad es de vital importancia, sobre todo porque el número de ciberataques alcanza nuevos índices cada año. Cuando se produce un ataque, los daños económicos para la empresa afectada son enormes. La creciente movilidad, el incremento del uso de las tecnologías digitales y tendencias como el BYOD (Bring Your Own Device) hacen necesario implantar medidas y mecanismos de seguridad para proteger las redes corporativas y mantener a raya a intrusos y hackers. Las mejores prácticas para la seguridad de las aplicaciones móviles incluyen el cifrado de datos, API seguras y actualizaciones y parches periódicos para cerrar las brechas de seguridad.
innovaphone ofrece una solución inteligente de comunicación y trabajo para empresas: la plataforma innovaphone myApps. Los usuarios se benefician de una gama cada vez más amplia de aplicaciones empresariales, aplicaciones de productividad y apps para la comunicación corporativa y la colaboración eficiente. Todas estas aplicaciones están a disposición de los administradores del sistema a través de la innovaphone App Store. Las aplicaciones individuales son accesibles a través de la interfaz de usuario intuitiva del cliente software myApps. La arquitectura abierta de la plataforma myApps permite el desarrollo de aplicaciones propias para el ecosistema myApps. El SDK innovaphone (Software Development Kit) proporciona todas las herramientas de desarrollo necesarias, ejemplos de código y mucho más. Los Partner tienen también la posibilidad de comercializar y distribuir sus propias aplicaciones a través de los canales de distribución de innovaphone.
Las soluciones innovaphone pueden utilizarse desde la nube u on premises (alquiler/compra) alojadas en los gateways VoIP innovaphone - no se necesitan servidores adicionales. En el caso de las instalaciones on premises, todos los datos permanecen en la empresa, proporcionando así mayor seguridad. Toda la cartera de productos innovaphone cumple siempre con el RGPD y garantiza la seguridad digital "made in Europe", asegurando que los datos de la empresa permanecen en la empresa, lo que añade un plus de seguridad.